Apple suspendió su programa global para analizar las grabaciones de los usuarios que interactúan con el asistente personal de la marca, Siri, el viernes (2). Apple dijo que la suspensión fue motivada por preocupaciones sobre la privacidad del usuario.
La semana pasada, el periódico The Guardian publicó un artículo que decía que los empleados de Apple podían escuchar todo lo que los usuarios decían a Siri, incluso sin su autorización. La manzana luego respondió suspendiendo el programa.
"Mientras llevamos a cabo una revisión exhaustiva, estamos suspendiendo el programa de revisión de grabación mundial de Siri", dijo un portavoz de la compañía en un comunicado. También según la nota, Apple dice que está trabajando en una actualización en la que el usuario podrá elegir si participar o no en este programa.
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Algo similar sucedió recientemente con Google. Las denuncias decían que sus empleados también tenían acceso a todas las grabaciones realizadas por el asistente personal de la empresa, incluso cuando no se llamó a este último.
En ese momento, Google dijo que usó estos audios para mejorar el servicio de asistente personal, permitiéndole responder más rápidamente a las solicitudes de los usuarios. Posiblemente en el caso de Apple ocurra lo mismo.
Otro hecho justificado por Google -y también por Apple- fue en relación al audio no autorizado. Según las dos compañías, los asistentes personales a menudo asumen que están siendo activados cuando no es así y accidentalmente graban su entorno.
Este es realmente un campo complicado. Por un lado, la necesidad por parte de las empresas de mejorar sus tecnologías y, por otro lado, el respeto a la privacidad de sus usuarios.
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Fuente: Reuters
