Los temas de privacidad en la red son cada vez más discutidos y por ello, varios organismos están atentos a las formas en que las empresas lo abordan. Grupos de consumidores de siete países europeos han presentado quejas de GDPR contra el seguimiento de ubicación de Google.
La Organización Europea de Consumidores (BEUC), de la que cada uno de los grupos es miembro, dice que las "prácticas engañosas" de Google con respecto al seguimiento de la ubicación no brindan a los usuarios una opción real para activarlo y que Google no dice exactamente todas las implicaciones de seguimiento. Si se prueba, Google tendrá que pagar una multa muy alta.
Las quejas surgieron después del descubrimiento de que Google puede rastrear la ubicación de un usuario incluso cuando la opción "Historial de ubicación" está desactivada. Para evitar por completo el seguimiento por GPS, se requiere una segunda configuración, en este caso, "Actividad web y de aplicaciones", que debe estar desactivada.
BEUC dice que Google usa "prácticas engañosas" para que los usuarios activen ambas opciones y no dice la verdadera implicación de todo esto.
Mientras tanto, Google dice que el historial de ubicaciones está desactivado de forma predeterminada y que está claro que apagarlo no detiene todo el seguimiento de la ubicación. En cualquier caso, la empresa evaluará el informe y verá si hay algo que se pueda considerar.
Google, según el demandante, si es declarado culpable, tendría que pagar una multa de hasta el cuatro por ciento de sus ingresos globales, que es más de $ 4 mil millones según sus presentaciones de 2017.
Fuente: The Verge
